Una buena refrigeración no siempre es sinónimo de tener que comprar un producto caro. Algunas marcas, como Spire, nos ofrecen productos de calidad sin tener que rascarnos demasiado el bolsillo. El VertiCool III es un disipador de grandes dimensiones, el cual presenta un pesado cuerpo totalmente de cobre, con un ventilador en la parte central encargado de evacuar el calor que atrape la base y con unas prestaciones superiores a productos de la misma categoría y nivel.

Especificaciones del producto:

Fabricante	Spire
Modelo	VertiCool III
Compatibilidad	Intel LGA 775 // AMD 64 (K8 & AM2)
Peso	865 g
Material	Base y aletas de cobre, 4 heatpipes de cobre
Dimensiones del disipador (Alto x Largo x Ancho)	126 mm x 93 mm x 93 mm
Ventilador	9 cm // Rodamiento de bolas
Dimensiones del ventilador (Alto x Largo x Ancho)	92 mm x 92 mm x 25 mm
Velocidad y ruido	2200 RPM ± 10 %  ~ 19 dBA // 3500 RPM ± 10 %  ~ 26 dBA
Caudal máximo de aire	56,21 CFM
Conector	Molex 3 pines

Presentación y vista en detalle:

El embalaje en el que viene presentado es el típico blister de plástico duro, mediante el que podremos ver de golpe todo el disipador. La protección es pobre y susceptible a golpes y abolladuras, pero que abarata de alguna manera su precio, una de sus principales ventajas frente al resto. Su contenido es simple, y muy parecido al de los disipadores de gama alta, lo que conlleva a que no tendrá que envidiarle nada a otros: disipador, diferentes sujeciones y complementos para los sockets soportados, y un regulador de revoluciones para el ventilador. Su forma es más bien cuadrada, sin prácticamente ninguna forma redondeada salvo en las aletas, y su tamaño es bastante grande, aunque dentro de la normalidad. Característica a destacar es que está enteramente fabricado en cobre, lo que augura un gran rendimiento, máxime si cabe teniendo en cuenta su peso, 865 g, casi un kilo de cobre. En la parte superior observamos cómo va anclada la cubierta, que ayudará en gran medida a redirigir de forma correcta el flujo de aire generado por el ventilador que lleva el disipador en su corazón. La separación entre aletas es muy pequeña, lo que nos da una idea del alto nivel de integración que tienen, y la gran cantidad de cobre que se ha necesitado para fabricarlo. Están ligeramente inclinadas hacia abajo, es normal, y es debido al encaminamiento del flujo de aire. Como observamos, atraviesan todas las aletas por los extremos. La base es gruesa y es donde van soldados los heatpipes. Un aspecto a destacar es que la sujeción del ventilador se hace mediante silent blocks, lo que aislará de vibraciones el marco de sujeción con el ventilador; éste es un detalle de los que pocas marcas puedan presumir, incluso los fabricantes de gama alta. El pulido de la base está poco conseguido, más bien se consigue una superficie mate, aunque del todo suficiente para realizar un correcto contacto entre el disipador y el IHS del micro.

Vista en detalle (Cont.):

Su peso en la báscula es de 855 g, bastante pesado para lo que estamos acostumbrados y un peligro potencial para nuestra placa base en el caso que consideremos transportar nuestra máquina. Este disipador es compatible para los sockets 774 de Intel, 755, 939 (socket K8) y para AM2 de AMD. El anclaje se realiza poniendo una especie de adaptador a modo de patas en los agujeros destinados para ello en el disipador. Dependiendo del socket pondremos uno u otro. Para comenzar con el montaje del disipador, extendemos la pasta térmica encima del IHS del micro y lo dejamos preparado. Hay que colocar el disipador encima haciendo coincidir los tornillos con los agujeros. Luego hay que sujetarlos en esa posición con la mano y darle la vuelta a la placa. Colocamos la placa posterior e introducimos los tornillos haciendo que coincidan con el disipador, y después atornillamos. Como decimos, hacen falta 3 manos; una que sujete el Spire, otra que coloque la placa posterior y la última, que atornille. No podemos decir que resulte un montaje sencillo, pero tampoco es imposible; eso sí, a los más novatos les costará algo más. El tornillo entra desde la parte posterior, hacia arriba. Por algún motivo, han decidido no usar separadores entre el metal y la placa, así que habrá que tener cuidado para no dañarla y evitar cortocircuitos con las pistas que puedan cruzarse. Siempre es recomendable usar algún tipo de arandela aislante o similar por dos razones: evitas arañazos en la placa y asegurar la integridad de las pistas. Este es el resultado final. El tamaño resulta impresionante, y como vemos, existe una gran densidad de aletas. El flujo de aire se dirige hacia la parte posterior de la placa base. Fijaos en la situación del ventilador para orientar de forma correcta el disipador. Como extra, podremos usar un control de RPM que viene preinstalado en una ranura PCI y que colocaremos si deseamos controlar manualmente la velocidad del ventilador; si no, sólo tendremos que conectar el molex directamente a la placa.

Equipo de pruebas:

Pruebas realizadas:

Hemos realizado las pruebas de temperatura en una caja con dos ventiladores, delantero y trasero de 12 cm; además, la fuente de alimentación extrae aire mediante su ventilador interno. Las lecturas de todas las temperaturas han sido tomadas desde la placa base, no usando ningún aparato medidor. Entre prueba y prueba apagamos el PC para que el micro estuviera en las mismas condiciones de encendido. Durante estas pruebas hemos tenido una temperatura ambiente constante de 24º C; la temperatura en el interior de nuestra caja se encuentra entre 4º y 5º C superior a la temperatura ambiental.

Para el estado "idle" el PC se dedicó exclusivamente a tareas ofimáticas y a la navegación por internet a la vez que se mantuvieron abiertos programas de descarga y mensajería instantánea. Para el estado "full" hemos corrido el Prime95 en modo "Torture Test" con la opción de " In-place large FFTs" durante otra hora, para tener una lectura de la temperatura de este estado lo más fiel posible.

Conclusión:

Después de comprobar las buenas temperaturas que alcanzamos con este Spire VertiCool III, sólo podemos concluir lo que ya veníamos diciendo a lo largo del artículo, y es que no siempre tenemos que estar resignados a desembolsar mucho dinero por un disipador adecuado para nuestro equipo, sino que tenemos opciones para reducir tanto las temperaturas como el ruido generado por el cooler de serie de la CPU. Algo que nos ha dejado estupefactos es el montaje tan aparatoso que conlleva, aunque con un poco de maña, este inconveniente se soluciona en un santiamén, dejándonos con el buen sabor de boca de un rendimiento aceptable, y sobre todo, observando una relación calidad/precio muy por encima de lo que estamos acostumbrados.

Posiblemente la mejor opción para muchos que busquen unas buenas cotas de refrigeración sin dejarnos una cantidad importante de dinero.

Ver todos los Reviews